Científicos del Instituto de Tecnología de Massachusetts, liderados por el investigador Markus Buehler, lograron transformar la estructura de una tela de araña en una composición musical gracias a los avances en impresoras 3D y estudios en comunicación interespecie.
Buehler, melómano empedernido, se cuestionaba si era posible extraer ritmos y melodías de origen no humano de la naturaleza, como las telarañas, pues era posible que sea una nueva fuente de inspiración musical muy diferente a la experiencia humana habitual.
Los investigadores asignaron diferentes frecuencias de sonido a las hebras realizadas mediante impresiones 3D, de modo que se crearan «notas musicales» que mezclaron con los patrones basados en la telaraña para generar melodías a través de un instrumento similar a un arpa.
Fuente: Euro Press.